San Pedro de Atacama: ¡Navidad en el desierto!

San Pedro de Atacama: ¡Navidad en el desierto!

24 horas de viaje en bus. Santiago – San Pedro de Atacama. Mejor no os cuento cómo tenía el trasero al llegar allí… Así pasamos nuestro 24 de Diciembre. Y llegamos sobre las ocho de la tarde a San Pedro. Aquello parecía un pueblo fantasma. Sin embargo, todos los hosteles en los que íbamos preguntando estaban llenos. Al final tuvimos suerte: encontramos uno muy barato y con un grupo de unas 20 personas de España, México, Brasil, etc que rápidamente nos invitaron a ir a cenar con ellos a un restaurante, ya que era Nochebuena… ¡Y nosotros que pensábamos que cenaríamos solos!

Con el grupo en Nochebuena

Comimos muy bien, hubo risas, buen rollo y buen ambiente… Aunque lejos de nuestras familias, creo que no podíamos haber pasado una mejor Nochebuena improvisada. 

Valle de la Luna 

Entrada al Valle

Para la tarde del día de Navidad, decidimos alquilar unas bicicletas y hacer el valle de la Luna pedaleando.

Juanito Indurain

Aunque por momentos tuve que bajarme de la bici para subir algunas cuestas, creo que es una de las mejores formas de recorrer este impresionante lugar: pasamos por unas cuevas de sal, vimos una duna gigante, un «muro» al que llaman el anfiteatro y dimos la vuelta al llegar a las tres Marías, para poder disfrutar de una de las mejores puestas de sol que he visto en mi vida.

Cueva de sal

¿Golum?

De excursión

Incluso nubes en el desierto…

Dos niños

Wall-e en el desierto

¡Salta!

Las tres Marías

Vistas

A ver si cojo color…

El anfiteatro

¿y la duna?

Panóramica

¿Es superman?

Impresionante puesta de sol

Garganta del diablo y Valle de la Muerte 

Por la mañana, junto a nuestro amigo Pablo (chico asturiano muy simpático), nos lo pasamos en grande disfrutando de un circuito en bici por la Garganta del Diablo. 

Con Pablito

Pues parece Tabernas…

¡Corre, Wall-e, corre!

Otra panorámica

Pobre Wall-e…

Por la tarde, junto a otro grupo de chicos del hostel, fuimos a ver la puesta de sol al Valle de la Muerte (donde el viento soplaba de manera insoportable), conocido por los colores rojizos y rosados que aparecen cuando el sol se va. Además, nos regalaron una botella de vino.

¡Me vuelo!

Valle de la Muerte

A resguardo

Puesta de sol

Esos colores…

¡¡Vino gratis!!

Nice group

Al día siguiente, reservamos el tour a Uyuni, olvidé mi tarjeta del banco en un cajero, Harry hizo una comida de despedida…

¡Un placer, chicos!

Y poco más. ¡Ah si! Aquella noche, Harry y yo fuimos a disfrutar de uno de los mejores y más claros cielos estrellados del mundo.

El tour a Uyuni nos esperaba al día siguiente y había que estar descansados y en forma…

1 Comentario
  • Beatrice Mazzocchi
    Posted at 14:33h, 08 abril Responder

    Santiago de Chile, magnifiquement située, est une ville superbe. Vous m’apprenez que c’est aussi une cité d’art, de culture et d’histoire, ce que j’ignorais. Dommage qu’elle soit liée à de sinistres souvenirs.
    Curieuse façon de célébrer Noël en allant pédaler dans le désert de la Valle de la Luna! Le coucher de soleil dans la Valle de la Muerte est absolument magnifique. Inoubliable, je pense.

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