Conociendo a un tal Perito Moreno.

Conociendo a un tal Perito Moreno.

Nuestra estadía en El Calafate se resumiría en hacer unas compras y buscar un hostel donde dormir. Temprano tomaríamos un minibus para pasar la mañana en el Glaciar Perito Moreno, una parada obligatoria para todo aquel que visita América del Sur. Aunque no es el glaciar más grande, es de los pocos que no está en retroceso y su pared vertical hace que sea uno de las más fáciles de observar.

Panorama del Perito Moreno

Camino al Parque hicimos una parada donde pasamos un divertido rato con unas simpáticas cabras.

Cabroselfie

Wall-e siempre haciendo amigos

Cuando te vas acercando al glaciar, empiezas a apreciar su inmensidad, aunque estés muy lejos aún.

Con el glaciar al fondo

Al llegar, lo primero que hicimos fue tomar un barco que te acerca a la pared y que te hace un recorrido por delante de ella… Y te sientes tan pequeño... No se acerca demasiado, ya que suele haber desprendimientos y es peligroso, pero aún así merece la pena contemplar este enorme glaciar desde el agua.

Desde el barco

Pequeño iceberg

Los colores del glaciar

Tras la travesía, que dura aproximadamente una hora, hicimos los senderos, donde puedes ver el glaciar desde lo alto.

Una «barra» de hielo

Y, tras tantos años hablando de él, al fin se conocieron

Los «Peritos Morenos» band brothers

Wall-e también disfrutó de las vistas

Juanito Moreno

Su tamaño, sus constantes «crujidos» y su precioso color (en algunas partes de un azul muy intenso) hacen que parezca un ente vivo, con mil millones de años a sus espaldas.

¡Impresionante!

Hielo azúl

Kilómetros y kilómetros de glaciar

Tuvimos la enorme suerte de presenciar (y filmar) un gran desprendimiento de la pared.

Fueron unas 4 horas en las que no pudimos dejar de observar a este gigante llamado Perito Moreno.

Sin palabras…

Tras unos sándwiches con unas vistas increíbles,

Sándwich y hielo, ¡nos falta la bebida!

volvimos al bus, que nos llevaría hasta donde nos esperaba uno de los dueños de la empresa Taqsa para llevarnos en su Jeep hasta la terminal (para que no perdiésemos nuestro siguiente bus, que ya estaba reservado): ¡el Chaltén nos esperaba!


2 Comment
  • Beatrice Mazzocchi
    Posted at 13:10h, 08 febrero Responder

    Heureusement que le Perito Moreno n’est pas régression. Mais pour combien de temps encore ?
    Il est difficile d’imaginer que dentelles masses de glaces puissent fondre jusqu’à disparaître un jour.
    Dommage que vous soyez déjà plus loin. J’aurais bien aimé vous charger d’un message amical pour les sympathiques chèvres que vous avez rencontrées.
    J’ai retrouvé le nom de l’acteur de cinéma italien auquel votre père ressemble. Il s’appelle Paulo Stoppa et il a tourné dans d’innombrables films.

    • juanpika
      Posted at 23:05h, 11 febrero Responder

      J’ai cherché l’acteur… Et oui! Mon père lui ressemble!! C’est drôle!

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