Sobreviví a la Carretera más peligrosa del mundo: the Death Road.

Sobreviví a la Carretera más peligrosa del mundo: the Death Road.

P1280316.JPG

Este era uno de las experiencias más anheladas por Harry, amante de la bicicleta, tanto que me estuvo hablando de ella desde que empezamos nuestro viaje.
Tras recorrer varias agencias y negociar precios, nos decidimos por «Ride On»: no era las más barata, pero si la que más confianza nos dio, parecía una empresa familiar alejada del resto, en la que tuvimos un trato muy cercano cuando fuimos a informarnos.

La excursión funciona así: te recogen temprano en tu hostel en La Paz, te llevan a desayunar a La Cumbre (4670 snm), te dan el equipo, la bici… ¡Y todo listo!

P1280106.JPG

P1280124.JPG

Éramos un grupo de 12 personas (máximo) y 3 guías. Cómo la mayoría no hablaba español, pasamos el día hablando y todas las explicaciones fueron en inglés… En un país hispanohablante… ¡De risa! Pero eso si, los guías hablan muy bien inglés y siempre dispuestos a solucionar cualquier problema o duda que tengas (por supuesto en Español, si no hablas inglés)

P1280134.JPG

La primera parte, el descenso se realiza sobre asfalto, para ir tomandole el manejo a la bici (con el plus de que hacía frío, había llovido y en ese momento chispeaba, para hacerlo un poco más peligroso…)

Después de más de una hora de descenso, subimos las bicicletas al minibus, que nos acercó hasta la verdadera «Carretera de la Muerte»: un estrecho camino de piedra y tierra, pasando bajo cascadas y con un enorme acantilado a un lado.

Es bastante impresionante, sobretodo cuando piensas que por ahí pasan (o pasaban) coches, autobuses y camiones… ¡En ambos sentidos!

img_1482P1280400.JPG

img_1492

Cada uno puede ir más o menos a su ritmo y pronto se forman dos grupos: el de los más rápidos y los menos… (Adivinad en cual iba yo…) Pero en casi todo momento el grupo va más o menos unido.

P1280236.JPG

A mitad de camino hicimos algunas paradas para reponer fuerzas, comer algo, para explicarnos cosas interesantes y hacer fotos.

Al llegar abajo, a Coroico (1230 snm) habíamos descendido casi 4000 metros de desnivel… Y hacia sol y ¡mucho calor! Menudo cambio…

Baño en una piscina y buffet libre para acabar un día inolvidable.

Es una experiencia muy divertida, tanto para amantes de las bicicletas como para amateurs. Altamente recomendable…

P1280333.JPG

Gracias a Ride On por este día, por la camiseta tan chula, la velocidad para hacernos llegar las fotos y vídeos y, en general, por preocuparse de que todos disfrutasemos tanto. Y a la gente tan divertida que conocimos… ¡Repetiría encantado!

P1280483img_1537

2 Comment
  • Adela
    Posted at 15:58h, 15 junio Responder

    Bueno la verdad es que después de leer la gran ruta me alegro que haya pasado ya y que todo saliera bien. Atrevido. 😡😡😡😡

  • viajandosolasblog
    Posted at 12:50h, 16 junio Responder

    De locos Juan! Me dio miedo solo de ver las fotos! Pero de seguro cuando vaya a Bolivia me animo y lo hago. Un abrazo

Poner un comentario